Ponce de León, Esteban

Fraile franciscano, maestro de capilla y compositor

Peruano Barroco tardío

Cuzco, 1692 - † Cuzco, 1750

Poco se sabe sobre la vida de este fraile agustino que firma algunas de sus obras con el título de “Lector Jubilado”; no existe información acerca de sus orígenes ni sobre sus estudios musicales. Sin embargo se le considera el primer músico realmente americano.

Edición discográfica con una obra de Esteban Ponce de León

Se convirtió en monje agustino, fue profesor de Teología Moral en la Real Universidad de San Marcos en Lima. El 20 de julio de 1713 la Orden de San Agustín celebró un Capítulo Provincial en Lima, al cual concurrieron representantes del Cuzco y de varias otras provincias que la Orden mantenía en Chuquisaca, Trujillo, Potosí, La Paz, Cochabamba, Oruro, Copacabana y Cañete. De los trece cargos destinados a la Casa del Cuzco, que estaba a cargo del Prior P. Juan Crisóstomo Roldan, el último de ellos fue para Fray Stephanum Ponce de León. Cuatro años transcurrieron hasta el próximo Capítulo celebrado el 20 de julio de 1717, donde figura décimo en la lista de trece cargos ejerciendo la función de ‘In Lectorem Theologiae Moralis: P. L. Fr. Estephanum Ponze de Leon’.

En 1721 todavía conservaba su cargo, esta vez octavo entre once puestos, hasta que, pasados otros cuatro años, en 1725, su nombre desaparece de las actas quedando sólo el de sus hermanos Paulo, Prior de Lima ese año y Provincial General de la Orden de 1746 a 1750, y Juan José Ponce de León, Provincial desde 1738 a 1742 y Doctor en Teología en la Real Universidad de San Marcos. El nombre de Fray Esteban reaparece en Cuzco recién el año 1738, esta vez como compositor de música religiosa y dramática y, más tarde, como Maestro de Capilla de la Catedral de su ciudad natal.

Compone en 1749 la ópera-serenata a cuatro voces “Venid, Venid, deidades”, en honor a Fernando Pérez Oblitas cuando fuera nombrado Obispo del Paraguay. Una obra que presenta el importante género del teatro musical desarrollado durante la colonia española y el cual constituía uno de los principales medios de entretenimiento y diversión popular en América Latina. En sólo las dos obras dramáticas de 1750 se menciona a este compositor como “Lector Jubilado” y como maestro de capilla de la Catedral de Cuzco, por lo que se cree que Fray Esteban pudo haber jubilado ese mismo año, luego de más de treinta años de trabajo docente, para ser nombrado de inmediato en el puesto de maestro de capilla.

"Venid, venid Deydades"